“Hay que soñar que atrapamos luciérnagas en aquel bosque y que cada una nos relata una parte perdida de nuestra vida para volver a ser los que somos pero ocultamos ser incluso con nosotros mismos”
Huellas de ti hay por doquier
Llegan entrada la noche.
Bailan y conversan,
Se van ebrias de recuerdos.
Y al amanecer,
Marcada, despierto.
Tus huellas, tus estragos.
Como si estuvieses todavía en mí.
Y es que estás en mí.
Huellas de ti hay por doquier
Llegan entrada la noche.
Bailan y conversan,
Se van ebrias de recuerdos.
Y al amanecer,
Marcada, despierto.
Tus huellas, tus estragos.
Como si estuvieses todavía en mí.
Y es que estás en mí.
Comentarios
Saludos y gracias por visitarme
tb te agregare a mis links
Alvarock
Besos
que bonito...
Ingrid, en este poema, hay conciencia del paso (las huellas) del amante? O solo el sueno interviene como no-recuerdo, sin embargo, como impresion corporal?
Solo es que me da curiosidad!
Un saludo!
En cuanto a lo de las huellas me parece precioso, porque cuando alguien ama a otra persona es como si se quedara con un poco de esa persona dentro, seguramente se quede. Un saludo
En donde difiero es en los efectos secundarios del amor, tal vez no sea tu caso, pero hay gente que puede llegar a extremos...
Mi blog es untigue.blogspot.com
y mi correo es dafrancoa@unal.edu.co
Diego
Llegan entrada la noche.
Bailan y conversan"
(Sin duda la buena poesía no tiene fecha de caducidad...)
Pero -cruzo los dedos-, las huellas siempre terminan borrándose.